La mitología persa es un vasto y rico tapiz de cuentos que ha fascinado a historiadores y entusiastas por igual. Entre sus figuras más encantadoras se encuentran los Peris: las hadas benevolentes de la mitología persa, seres míticos que a lo largo de los siglos han capturado la imaginación con su gracia y belleza sobrenaturales.
¿Quiénes son los Peris en la mitología persa?
Los Peris son seres sobrenaturales que se asemejan a las hadas y son conocidos por su inmensa compasión y belleza. En la mitología persa, estas entidades desempeñan roles tanto benevolentes como malévolos, a menudo vinculados al bienestar de los humanos. Descritos como seres inmortales, los Peris pueden ser tanto masculinos como femeninos y se dice que tienen descendencia de gran belleza.

Estas criaturas eran a menudo representadas en la antigüedad como seres atrapados entre dos mundos, ni completamente malignos ni puramente benevolentes, lo que les confería una naturaleza ambigua y fascinante.
Los Peris han sido mencionados en varias obras literarias persas, entre ellas el famoso poema épico «El Shahnameh» de Ferdowsi, donde se narran sus hazañas y su eterna lucha contra los demonios.
Los doce dioses principales de la mitología persa
La mitología persa antigua describe un panteón de divinidades lideradas por Ahura Mazda, el dios supremo. Estos dioses representan diversos aspectos de la vida y el cosmos, y cada uno desempeña un papel específico en las creencias religiosas persas.
Entre los más destacados, se encuentra Mithra, el dios del sol y la verdad, y Anahita, la diosa de la fertilidad y la sabiduría. Estas deidades jugaban un papel central en las prácticas religiosas y se les rendía culto a través de rituales complejos y festividades.
Los dioses persas antiguos fueron venerados hasta la llegada del zoroastrismo, que reconfiguró el panteón y enfocó la adoración hacia Ahura Mazda.
Los doce dioses principales reflejan la rica diversidad de la mitología persa antigua y su profundo impacto en la cultura y espiritualidad de la región.
Ahura Mazda y Angra Mainyu: el bien y el mal
El principio central de la mitología persa es la eterna lucha entre el bien y el mal, personificados por Ahura Mazda y Angra Mainyu. Ahura Mazda es el dios de la luz, la sabiduría y la bondad, mientras que Angra Mainyu representa las fuerzas oscuras y destructoras.
Este conflicto cósmico refleja la naturaleza dual de la existencia y es un tema recurrente en las creencias persas. La lucha entre estos dos seres trasciende el plano físico, influyendo en las acciones y destinos de los mortales.
La influencia de Zoroastro fue decisiva en la promoción de la adoración de Ahura Mazda como la deidad suprema, lo que llevó a una reinterpretación de las demás entidades divinas como manifestaciones o emanaciones de su poder.
Esta dicotomía entre el bien y el mal es uno de los aportes más significativos de la mitología persa al pensamiento religioso y filosófico en general.
El origen de los mitos persas
Los mitos persas tienen sus raíces en la historia antigua de lo que hoy es Irán y sus regiones circundantes. Estas leyendas se han transmitido a lo largo de generaciones mediante la tradición oral y textos sagrados, como el «Avesta».
Estos mitos surgieron en una época en la que los pueblos indoeuropeos se asentaron en la meseta iraní, trayendo consigo sus creencias y rituales religiosos, que se entrelazaron con las tradiciones locales.
La riqueza del folklore persa es resultado de la fusión de diversas culturas que convergieron en la región, lo que explica la variedad y profundidad de sus mitos y leyendas.
Influencia de los Peris y genios en la cultura popular
La figura de los Peris ha trascendido la mitología y se ha incorporado a la cultura popular y la literatura de muchas regiones. Estos seres han inspirado a escritores, músicos y artistas, convirtiéndose en símbolos de belleza y bienaventuranza.
- En la literatura europea, la imagen de los Peris ha sido adoptada para representar espíritus de la naturaleza similares a las ninfas y las musas.
- En la música, composiciones como el poema sinfónico «Peri» de Robert Schumann reflejan la fascinación occidental por estas criaturas.
- En el arte, los Peris a menudo son representados como seres etéreos y luminosos, destacando su naturaleza celestial y su influencia benevolente.
Simurg y otras criaturas míticas persas
Además de los Peris, la mitología persa está poblada por una plétora de criaturas fascinantes, siendo el Simurg una de las más emblemáticas. Este ser, a menudo descrito como un pájaro gigantesco, simboliza la sabiduría y la purificación.
El Simurg ocupa un lugar destacado en el «Shahnameh», donde lleva a cabo actos heroicos y sirve como guía para los personajes humanos.
Otras criaturas, como dragones, grifos y djinns, también pueblan el imaginario persa, cada uno con sus propias historias y significados.
Preguntas frecuentes sobre las deidades benevolentes persas
¿Cuáles son los dioses de los persas?
Además de Ahura Mazda, la mitología persa cuenta con dioses como Mithra, Anahita y Vayu, entre otros. Estos dioses representan diferentes fuerzas de la naturaleza y aspectos de la vida diaria.
Cada uno desempeña un papel único en la cosmología persa, y juntos forman un panteón rico y complejo que ha influenciado a muchas otras culturas.
¿Quién es el rey de los dioses en la mitología persa?
Ahura Mazda es considerado el rey de los dioses en la mitología persa. Es la divinidad suprema, creador del universo y símbolo del bien y la luz en la continua lucha contra las fuerzas del mal.
¿Qué dioses representaban el bien y el mal entre los persas?
Ahura Mazda representa el bien, la verdad y la luz, mientras que Angra Mainyu simboliza el mal y la oscuridad en la mitología persa. Esta dualidad es fundamental en la religión y filosofía persa.
¿Qué significa Simurg?
Simurg, derivado del antiguo persa, significa «pájaro divino» o «pájaro de 30 colores». Es un símbolo de sabiduría y curación, a menudo asociado con la inmortalidad y la renovación.
Con una herencia tan rica y multifacética, la mitología persa y sus encantadoras hadas benevolentes, los Peris, sigue maravillando e inspirando a la humanidad, dejando un legado que perdura en la cultura contemporánea.

Profesora numeraria del programa Paideia en Rodas, Grecia. Como greco-americana sentí una fuerte conexión con mi historia al entrar en contacto con mi herencia helénica.